Los profesores de escuelas y colegios públicos de Colombia iniciaron el jueves una huelga indefinida para exigir mejoras salariales y laborales, dejando a millones de estudiantes sin clases en medio de una ola de protestas sociales contra el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos.
La Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode), el mayor sindicato de profesores del país, informó que el cese de actividades de 350.000 educadores dejó sin clases a más de 8 millones de estudiantes.
El presidente de Fecode, Carlos Enrique Rivas, dijo que la huelga comenzó para exigir el pago de beneficios salariales pactados anteriormente, mejores condiciones de trabajo y un buen servicio de salud debido a que los operadores no presentan las garantías ni la calidad de atención requerida.
Pese a que el presidente Santos aseguró que no hay recursos económicos para atender las demandas de los profesores, el sindicato de profesores y la ministra de Educación, Yaneth Giha, anunciaron que mantendrán el diálogo para tratar de llegar a un acuerdo.
«No podemos ceder o darles lo que piden simplemente porque no tenemos los recursos», dijo el mandatario colombiano horas antes del inicio de la huelga.
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Giha aseguró que el gobierno ha venido cumpliendo los compromisos pactados con los profesores, incluyendo la nivelación de salarios, por lo que la huelga «es injustificada».
La protesta de los profesores del sector público es la tercera que se produce en el país esta semana, después de la que iniciaron los habitantes del selvático departamento del Chocó para demandar al Gobierno una solución a sus problemas sociales y del cese de actividades de los taxistas contra Uber.
Para la próxima semana los trabajadores estatales convocaron a una huelga para exigir un incremento salarial de 10,75 por ciento, cinco puntos porcentuales por encima de la inflación del año pasado. Reuters
