El rey Felipe VI llegó este miércoles a Irak en una visita no anunciada, la primera de un monarca español en cuatro décadas, y se reunió con las tropas españolas en el país.
Felipe VI, que cumplía 51 años este miércoles, se reunió con las fuerzas especiales españolas desplegadas en Irak y con el presidente iraquí Barham Saleh, cuyo país asegura haber derrotado al grupo Estado Islámico (EI) pero donde las tropas iraquíes y de la coalición internacional siguen con operaciones antiyihadistas.
For impotence the generic cheapest generic levitra is easily available over the web. So, there is no such cialis generic usa boundary of producing the medicine. No matter what the cause is, if you are living generic cialis with this condition then gynecomastia surgery in Delhi can help you in the best possible way. viagra generika 100mg This gives a legitimate erection to about four to five hours before planning for the intimate moment and then be all prepared to see the magic which it’s going to do.
«Gracias por lo que hacéis, y gracias por cómo lo hacéis», dijo el monarca a los miembros del contingente español, vestido con uniforme de campaña.
El rey visitó el Bagdad Diplomatic Support Center (BDSC), donde se entrevistó con altos mandos de la coalición así como con los representantes españoles en este centro de mando.
Acompañado de la ministra de Defensa, Margarita Robles, el monarca mantuvo luego un encuentro con el presidente Saleh y finalmente se trasladó a la base Gran Capitán de Besmaya, a unos 10 kilómetros de la capital iraquí.
La misión militar en Irak, con 551 efectivos, es la segunda más numerosa de las que tiene actualmente España en el extranjero tras la del Líbano, que supera los 600.
En 2003, España participó junto a Estados Unidos en la invasión que derrocó al dictador Sadam Husein, y en la actualidad mantiene en el país a cientos de instructores que dan apoyo a las fuerzas iraquíes.
El rey expresó a los militares «el orgullo que se siente como español, como militar, como rey».
«El trabajo que hacéis a diario sé que es duro, sé que estar fuera de casa tanto tiempo afecta a todos», añadió Felipe VI.
«Pero vosotros sabéis mejor que nadie la importancia de vuestra misión», insistió, destacando la «mentalidad de ayudar a este pueblo iraquí que ha sufrido tanto», en una «región que necesita un entorno de seguridad y de estabilidad para su progreso».
Numerosos dirigentes extranjeros visitaron Irak desde el comienzo del año, incluidos el presidente estadounidense Donald Trump -que no se reunió con dirigentes iraquíes- y el rey Abdalá II de Jordania.
En muchos de esos encuentros se abordó el tema de la organización yihadista Estado Islámico, después de la sorpresa que causó el anuncio de Trump de que iba a retirar a sus 2.000 soldados de Siria.
La mayor parte de las tropas de los países de la coalición atiyihadista, con Estados Unidos al frente, se hallan en Irák, desde donde intervienen también en la vecina Siria y su guerra. AFP