Las recientes declaraciones de Josep Borrell, alto representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, hacen ruido.
El funcionario europeo pidió tratar con los talibanes porque estos «han ganado la guerra». Palabras derrotistas en medio de un contexto delicado, ya que la comunidad internacional aún exige respetar los derechos humanos de los afganos que están en el país y que deberán sobrevivir al extremismo islámico.
Your queries will be solved quickly to free viagra canada increase your sexual desires, you may seek medical help. purchase generic cialis Yes, some of you might not be having any disease or any other health problem. Worldwide, nearly 140 million men are affected by some physical causes such sildenafil tabs as diabetes, high cholesterol, blood pressure, hormonal change, surgery, nerve damage, kidney, heart and liver issues. canadian viagra generic It is important to discuss various things one could do for improving sexual health condition.Por otro lado, están los consecuencias a nivel estratégico, debido a los puentes que podría tender el grupo terrorista con países de intereses hegemónicos como Rusia, China e Irán.
“Trataremos con las autoridades afganas tal como son, pero al mismo tiempo permaneciendo vigilantes naturalmente sobre el respeto de las obligaciones internacionales aceptadas por los diferentes Gobiernos afganos durante más de 15 años”, esbozó Borrell tras una videoconferencia con ministros de Exteriores de la UE respecto a la crisis afgana.