En medio de una crisis de seguridad nunca antes vista en México, el presidente Andrés Manuel López, asegura que en el país serían «protegidos y bienvenidos», los afectados por los acontecimientos entre Rysia y Ucrania.
Con gran sorpresa para los mexicanos y para el exterior, fue recibida la declaración del mandatario latinoamericano, en la que asegura que: «Todos los que nos pidan refugio en nuestro país serán recibidos, protegidos y bienvenidos».
Lo anterior, porque la violencia máxima que se vive en México no deja lugar a dudas de que es más peligroso estar en el país que en el conflicto de Europa del Este, opinan los ciudadanos y opinadores internacionales.
También, López Obrador descartó aplicar sanciones económicas a ninguna empresa a fin de «estar en condiciones de hablar con las partes en conflicto», ni tampoco restringir el acceso a los medios de comunicación rusos que han sido acusados de propagandísticos, pues hay que «hacer valer la libertad».
Esto último considerando que grandes, medianas y pequeñas empresas han cerrado sus operaciones en México durante los tres primeros años de la administración izquierdista que aseguran, está acabando con uno de los países considerados más prósperos de Latinoamérica en el pasado.