El presidente mexicano Andrés Manuel López, no pudo enfrentar el ahogo de su gobierno en la corrupción. Las repetidas bases de su gobierno y del partido político Morena: «No mentir, no robar y no traicionar», han sido desmentidos en los hechos.
El presidente López perdió toda credibilidad a su contante afirmación de que en su gobierno no hay corrupción, «no es como los de antes». Y no, no es como los de antes, para cada vez mayor número de mexicanos, es peor.
Ya en el pasado reciente, han sido exhibidos videos y documentos que muestran el grado de corrupción tanto de familiares, como de gente que forma parte del equipo del gobernante, incluyendo a su prima Felipa, que cobró fama por los «negocios» realizados por millones de pesos en PEMEX.
Esta vez se publicaron videos que dan cuenta de la recepción de fajos de billetes, por Raúl Pozos Lanz, actual secretario de Educación de Campeche; Armando Toledo Jamit, jefe de la oficina de la gobernadora Laysa Sansores; y la senadora de Morena por esa entidad, Rocío Abreu Artiñano. El dinero fue entregado en las oficinas del gobernador interino, Carlos Miguel Aysa, en 2021, cuando eran integrantes del equipo de campaña que llevó a Layda Sansores a la gubernatura de Campeche. La publicación se hizo en la empresa Televisa.
Los hechos han sido interpretados como dinero proveniente de un gobierno del PRI, utilizado para la campaña de la actual gobernadora de Campeche, de Morena, de la gente del presidente.
Este hecho no ha podido ser desmentido como otros anteriores y es que a la fecha, el barrido que se haría de arriba para bajo de la corrupción, no ha comenzado.
