Para decepción de los mexicanos, una vez más es incrustado en la lista de funcionarios públicos del gobierno federal, un personaje producto del amiguismo, influyentismo y nepotismo, como titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS).
Así lo expresan ciudadanos mexicanos en redes sociales, quienes consideran que este gobierno encabezado por Andrés Manuel López Obrador, se sigue practicando el nombramiento de funcionarios por amiguismo y no por capacidades, esta vez, al otorgarle el puesto antes anotado a Marath Baruch Bolaños López, distinguido más por su cercana amistad con el hijo del presidente, de mismo nombre, que por sus cualidades profesionales.
Aunque el recién nombrado secretario es catedrático en la UNAM, se le cuestiona que sus materias dominantes sean en las carreras de Relaciones Internacionales, Sociología y Ciencias de la Comunicación, nada qué ver con vigilar el cumplimiento de los derechos laborales de las y los trabajadores y sus familias, que ahora le tocaría atender.
Cabe señalar que Bolaños López también fue secretario particular de Marcelo Ebrad de diciembre del 2018 a septiembre del 2020, función que tampoco se acerca a su nueva encomienda. Lo mismo ocurre con su paso por la Asamblea Constituyente, como diputado del grupo parlamentario de MORENA.
En la revisión de su paso por el estudio y desarrollo profesional, no se encuentra un solo punto que le acerque a los temas de los que al menos podría tener nociones, para poder respaldar la confianza que le ha otorgado el presidente Andrés Manuel López Obrador y que tan molesta tiene a gran cantidad de los usuarios de redes sociales. ANA MARIA GUERRERO
