Crece la sospecha de que el desacuerdo del aspirante presidencial no elegido, del partido oficial en México, Marcelo Ebrad, es en resumen, un plan gestado por el gobierno federal para intentar desestabilizar el voto de la oposición.
Cada día que pasa, son más las voces mexicanas que dudan de una real separación entre Ebrad y el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador. Así se alimenta la idea de que todo es una farsa para que el ex secretario de Relaciones Exteriores logre captar votos que consideran, serían para la fuerte opositora Xóchitl Gálvez.
Analistas, opinadores y pueblo, están dejando salir de sus mentes la idea de que ante el crecimiento continuo de quien en poco tiempo será oficialmente la candidata opositora del debilitado gobierno morenista, se ha echado mano de una farsa que crea mayor desacuerdo popular con el gobierno federal actual.tictacnews