Aunque el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, parece estar decidido a aniquilar o al menos disminuir a su mínima expresión, al Poder Judicial, uno de los tres poderes que conforman la Republica, este reprueba las muestras de odio en contra del mandatario latinoamericano.
Como es sabido, desde la reconformación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), con la que se experimenta la defensa de la Constitución, aún por encima de las decisiones de López Obrador, éste no ha perdido ocasión en desacreditar a la institución que cumple cabalmente con su función.
Ahora a través de los legisladores del partido oficial y los pequeños que le acompañan, PT y PVEM, el presidente mexicano propone terminar con los fideicomisos que sobreviven en el país, luego de que él mismo acabara con en resto. Los que quedan son los del Poder Judicial y el compromiso oficial es extinguirlos.
Se pretende a través del estrangulamiento económico, deshacerse de alguna manera, del Poder Judicial.
El día de hoy, un grupo de manifestantes, con gritos de «odio» en contra de Andrés López, quemaron una figura que le representa. Defendieron a su manera, las agresiones que el Poder Judicial ha estado soportando del Poder Ejecutivo, con acompañamiento de los legisladores oficiales.
En respuesta, tanto la SCJN, como el Consejo de la Judicatura Federal (CJF), han reprobado la acción ciudadana en contra del presidente del país latinoamericano, a través de un comunicado, han establecido: «Como se ha expresado en otros momentos, el discurso de odio que supone la quema de representaciones de una persona, por pública que esta sea, es un obstáculo para el cumplimiento de los objetivos que nos unen como mexicanas y mexicanos: la salvaguarda de la democracia, de los derechos humanos y del Estado de Derecho, por lo que no debe tolerarse ninguna expresión de esta naturaleza“.tictacnews.us