Separatistas prorrusos dijeron este martes que habían empezado a retirar armamento pesado de la línea de frente en el este de Ucrania bajo un acuerdo de alto el fuego, pero el Ejército ucraniano, que asegura que no se retirará hasta que paren los combates, informó de más ataques.
Los combates se han reducido en el este de Ucrania en los últimos días después de que los rebeldes inicialmente ignoraran un alto el fuego que iba a empezar el 15 de febrero y atacaran una localidad en manos del Gobierno.
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Después de tomar la ciudad, los rebeldes respaldados por Moscú han indicado consistentemente que quieren que la tregua entre en vigor. Kiev dice que los rebeldes todavía siguen disparando, algo que éstos niegan.
Los países occidentales no se han dado por vencidos sobre un acuerdo de alto el fuego que ponga fin a los enfrentamientos en los que han muerto más de 5.600 personas, pero han advertido de nuevas sanciones económicas contra Moscú si los rebeldes avanzan más hacia el territorio que el Kremlin llama «Nueva Rusia».
«Hoy a las 09:00 de la mañana (0600 GMT) comenzó la retirada planeada de equipamiento pesado», dijo el comandante rebelde Eduard Basurin a Reuters.
«Estamos retirándolo a 50 kilómetros de la línea fronteriza (…) Por supuesto no diremos exactamente a dónde lo estamos retirando», agregó.
Basurin negó las informaciones del Ejército ucraniano de combates en el sudeste de Ucrania, y dijo que hubo «provocaciones» del lado del Gobierno, pero no enfrentamientos graves.
Kiev dice que los rebeldes lanzaron ataques contra pueblos cerca de Mariupol, una localidad portuaria de 500.000 habitantes, que Ucrania teme que pueda ser el próximo objetivo de los separatistas.
«Ha habido bombardeos bastante intensos desde esta mañana. La situación es tensa pero bajo control», declaró Dmytro Chaly, portavoz del Ejército ucraniano en Mariupol, al canal de televisión 112.
Entre las áreas que Kiev dijo que habían sido bombardeadas estaba el pueblo de Shyrokynem cerca de Mariupol, y la zona cercana a Deváltsevo, ciudad que los rebeldes capturaron la semana pasada.
El servicio de prensa de los separatistas DAN informó de 10 incidentes de bombardeos del Gobierno cerca del bastión rebelde de Donetsk.
En un primer paso para implementar la tregua, las partes intercambiaron prisioneros a última hora del sábado. El domingo dijeron que habían comenzado la retirada de armamento pesado, pero el lunes Kiev sostuvo que no se retiraría hasta que terminaran los disparos.