Cerca de 31,000 fragmentos de huesos humanos han sido encontrados en un rancho de Nuevo León desde 2011 a la fecha. El lugar supuestamente era utilizado por el crimen organizado para incinerar y desaparecer a sus víctimas, informó la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
La portavoz de la dependencia, Pricila Rivas, informó que hasta el momento han podido determinar que los restos pertenecen a al menos 31 personas que habían sido reportadas como desaparecidas.
El rancho está ubicado en el poblado de Salinas Victoria, aproximadamente 26 kilómetros al norte de la zona metropolitana de Monterrey, capital del estado de Nuevo León, fronterizo con Estados Unidos, y es un municipio controlado por la organización criminal Los Zetas.
Rivas destacó que la Procuraduría trabaja en ese lugar desde el año 2011 y aún siguen localizando restos. Debido a ello lo mantienen bajo vigilancia policial y su ubicación exacta también se conserva resguardada.
La portavoz señaló que no atribuyen los restos a un grupo del crimen organizado en específico y que los cuerpos encontrados en la zona pueden ser víctimas de la ola de violencia que se registró en 2010, precisó.
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Las familias organizadas en Dadhac realizan investigaciones en conjunto con las autoridades para localizar a unos 300 desaparecidos y revisan el avance de los casos con los fiscales cada dos meses.
“Cada que algún familiar de un desaparecido solicita que la procuraduría acuda al lugar, o no está conforme con la investigación o tiene sospechas de que su familiar puede estar en esa zona, nosotros acudimos al lugar, es nuestra obligación”, dijo Rivas a CNNMéxico.
Desde el año 2007 a la fecha, se han reportado en el estado de Nuevo León alrededor de 1,100 personas desaparecidas, según cifras oficiales, y 1,600, según organizaciones civiles.
La mayoría son víctimas de los grupos del crimen organizado que operan en la región.