Al menos tres personas murieron y otras 26 fueron reportadas como desaparecidas tras las inundaciones y deslizamientos de tierra causados por las fuertes lluvias que se registran en el noreste de Japón.
En la ciudad de Joso, en la prefectura de Ibaraki, 25 personas, entre ellas dos niños, desaparecieron después de que las fuertes lluvias provocaron que los diques del río Kinugawa se rompieran, reportó la agencia japonesa de noticias Kyodo; el río se desbordó y cubrió un área de 32 kilómetros cuadrados, afectando unas seis mil 500 casas en la ciudad de Joso, ubicada a unos 50 kilómetros de Tokio.
En la Prefectura de Tochigi, una mujer de 63 años de edad murió cuando un alud de lodo golpeó su casa en la ciudad de Kanuma. En Nikko, también en la prefectura de Tochigi, un hombre de unos 20 años murió después de caer en una tubería de desagüe, mientras que un hombre de 62 años de edad fue arrastrado en su automóvil por las fuertes corrientes y está desaparecido. Los funcionarios de la ciudad de Kurihara, en la prefectura de Miyagi, informaron que una mujer de 48 años de edad murió después de que fue arrastrada en su coche el viernes por la mañana.
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Las fuertes lluvias en una gran parte del archipiélago se deben al paso del tifón »Etau», convertido en ciclón extratropical (tormenta de baja presión atmosférica), a su paso por el centro de Japón. La Agencia de Meteorología de Japón ha emitido este viernes una alerta de emergencia por las lluvias torrenciales sin precedentes que se han producido en la prefectura de Miyagi, en el noreste del país.
Centenares de personas quedaron varadas en espera de ser rescatadas en sus casas o en centros comerciales en las zonas afectadas. El personal de rescate, incluidos miembros del Departamento de Policía Metropolitana y las Fuerzas de Autodefensa Japonesa, continúan con las operaciones para rescatar a los residentes l
