Dos de las varias obsesiones de Gabriel García Márquez, en su vida y en su obra, fueron las dictaduras y los dictadores, pero también de los entuertos descomunales en América Latina. De ese par de intereses de García Márquez hablaron su amigo, Sergio Ramírez, Mónica González, Elio Gaspari, Jon Lee Anderson, Lucía González y el sacerdote Alejandro Solalinde, quienes de diferentes maneras dieron cuenta de estas pasiones del periodista y escritor.
Como parte del programa del Festival del Premio Gabriel García Márquez de Periodismo, periodistas, escritores y activistas sociales recordaron al Nobel de Literatura a través de dos de los temas que le interesaron, pero ante todo su figura fue el pretexto para hablar de la realidad actual de países como México, Brasil, Colombia y Nicaragua, de sus problemáticas: la corrupción, la impunidad, la democracia, la inseguridad y la violencia.
Durante la mesa «Obsesiones de Gabo: componer entuertos descomunales», el padre Alejandro Solalinde habló de la importancia del periodismo en México pues dijo que el trabajo de los comunicadores ha sido fundamental en el abordaje de la violencia contra los migrantes, los asesinados producto del narcotráfico y la criminalidad que se vive en el país.
Dijo que los periodistas mexicanos trabajan a pesar de las amenazas y el peligro al que se exponen, y que ellos han hecho más por los migrantes que las autoridades. «Esto que hacen ellos deberían estar haciendo, mínimo, las autoridades eclesiásticas»; luego agregó que los medios han visibilizado a los migrantes, le han abierto los ojos a los mexicanos y «los medios han cuidado mi vida».
En la conversación, el padre Solalinde participó con Lucía González, directora del Museo Casa de la Memoria de Medellín, quien dijo que a pesar del trabajo de los medios de comunicación, los colombianos aun no conocen la dimensión de la tragedia que esta nación ha vivido. «Cómo debe enfrentar la sociedad un problema como el de este país con más de siete millones de víctimas, de los cuales más de dos millones son menores de edad. Cómo hacemos nosotros desde el Museo Casa de la Memoria para enfrentar este problema».
I write in my subject line:»bad news…»Now, I don’t just generic viagra in usa leave it like that then write something totally unrelated to the subject line. Plavix, and the acid-reflux fighters Prevacid and Nexium are other top cheap cialis 20mg sellers. Are you one particular of «The Four»?  The National Heart Lung and Blood Institute estimates that a person in every 4 American older people has hypertension, also recognized as significant blood pressure!  And after you get it, unica-web.com on line levitra you will find things that can be achieved about it. The condition has emerged as a widespread problem these days pfizer viagra 50mg and it has influenced about half of male population in the world has erectile issues.
La jornada de ayer miércoles también incluyó la disertación de periodistas y escritores en torno al tema «Dictadura y dictadores: la huella en América Latina«, donde el escritor nicaragüense Sergio Ramírez dijo que las dinastías que han extendido la dictadura en Nicaragua, y donde a pesar de todo hoy se puede hablar de democracia.
En la exposición de las historias de Nicaragua, Chile y Brasil, Sergio Ramírez, Mónica González y Elio Gaspari, respectivamente, coincidieron en que sus países tienen una dictadura imperfecta, pero también en que perfeccionarla y avanzar no depende solo de los gobernantes, sino también de los gobernados.
A pesar de la lectura de Jon Lee Anderson, de que en América Latina aún no priva la democracia -pues hay sicarios, guerrillas y cárteles del narcotráfico– Mónica González destacó los avances que ha tenido la región y cómo la gente se ha comenzado a hacer consciente de que debe ayudar a avanzar.
Las actividades de la tercera jornada del Festival del Premio Gabriel García Márquez de Periodismo, que se realiza hoy y donde se abordarán otras de las obsesiones de Gabo, concluirá con el concierto homenaje a cargo de otro de sus amigos, Pablo Milanés.