Los bajos salarios que reciben los trabajadores mexicanos han detonado el crecimiento exponencial de la población subocupada. De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) durante el último año 44 mil mexicanos engrosaron las filas del sector poblacional que necesita trabajar más tiempo para solventar sus gastos.
A diciembre de 2014 los mexicanos subocupados sumaban 3.97 millones, cantidad que para diciembre de 2015 alcanzó 4.42 millones de personas, según cifras del instituto autónomo.
Expertos afirman que esto responde a los bajos salarios. El último Índice de Final de Quincena (IFQ) publicado por la agencia especializada en investigación de mercado De la Riva Group refiere que para el promedio de los trabajadores es imposible cubrir sus gastos quincenales con su salario; sólo cubren 13.75 días, según publica el sitio web dineroenimagen.com.
Las estadísticas del índice sostienen que 40 por ciento de la clase trabajadora pudo solventar sus gastos sólo 10 días, por lo que muchos debieron recortar gastos, se atrasaron con algunos pagos o pidieron prestado.
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Luis Foncerrada Pascal, director general del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (Ceesp), órgano asesor del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), consideró que, aunque en términos netos las empresas que operan en el país siguen generando empleos, éstos son de bajos salarios.
Destacó que seis de cada 10 personas ocupadas en el país obtienen ingresos de hasta tres salarios mínimos, lo que en el mejor de los casos significan seis mil 570 pesos, monto que impide la reactivación del mercado interno debido a que la mayor cantidad de consumo se concentra en productos de la canasta básica.
«Es evidente que debido a que la mayor cantidad de personas está ocupada en posiciones laborales con compensaciones de hasta tres salarios mínimos, la capacidad de consumo de productos no básicos es limitada”, apuntó.
