México aumentó en 2.8 millones la incorporación de personas al sistema financiero formal entre 2012 y 2015, y mas de 3.4 millones de personas con algún tipo de seguro en el mismo periodo, pero casi el 56 por ciento de la población adulta continúa sin algún tipo de cuenta bancaria, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) que presentó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
«Más de 30 millones de personas continúan guardando su dinero en su casa y eso demuestra lo mucho que falta por hacer», señaló Julio Santaella, presidente del Inegi, en la presentación del documento.
Según la encuesta, el 92 por ciento de la población adulta en México continúa prefiriendo pagar en efectivo.
Jaime González Aguadé, presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), detalló el aumento en los últimos tres años de la cobertura en diversos servicios financieros.
La proporción de adultos con una cuenta de ahorro pasó de 25 a 34 por ciento, mientras que el crédito aumentó de 19 a 22 por ciento; los seguros aumentaron de 16 a 19 por ciento; mientras que el ahorro para el retiro de 20 a 31 por ciento.
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“Pero quizá lo más relevante sea, que no solo aumentó el número de personas con productos financieros, sino la densidad de los productos financieros de la población. Es decir, las personas cada vez contratan más productos financieros”, señaló González Aguadé.
Asimismo, González Aguadé destacó que se registraron avances en cuanto a inclusión financiera de grupos proclives a ser excluidos como el sexo femenino en zonas rurales. Para dicho segmento, aumentó la cobertura de 19 a 38 por ciento, “cifra que supera el uso de cuentas por hombres en zonas rurales”.
En contraparte la ENIF registró 11 millones de ex usuarios del sistema financiero, que conforman el 14 por ciento de los adultos sin cuenta bancaria, que dejaron de usar estos servicios por distintos motivos.
El 50 por ciento dejó de trabajar y ya no usaba su cuenta para recibir su salario; el 10 por ciento tuvo una mala experiencia con el sistema financiero; el 10 por ciento canceló porque no utilizaba los servicios y el cinco por ciento no cumplía con un saldo mínimo, entre otros motivos.
Además, casi 32 millones de mexicanos, que conforman el universo de los adultos sin una cuenta bancaria nunca han sido usuarios del sistema financiero. González Aguadé indicó que este tipo de datos representan la mayor oportunidad de expansión de los servicios financieros.
