
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, consideró que las recientes muertes de ciudadanos negros a manos de policías es síntoma de «retos mayores», como las desigualdades raciales del sistema judicial y la desconfianza de las minorías en las fuerzas del orden.
En un mensaje en su página de Facebook, Obama lamentó los casos de Alton Sterling, un hombre negro de 37 años muerto el martes en Baton Rouge (Luisiana) a manos de dos policías blancos, y del joven Philando Castile, que perdió la vida anoche en Falcon Heights (Minesota) en otro incidente con agentes que le detuvieron por una infracción de tránsito.
«Hemos visto estas tragedias demasiadas veces y nuestros corazones están con las familias y las comunidades que han sufrido una pérdida tan dolorosa», subrayó Obama, que este jueves emprendió el que probablemente sea su último viaje a Europa como presidente para participar en una cumbre de la OTAN y después visitar España.
El Departamento de Justicia, encargado de investigar crímenes raciales, y el Buró Federal de Investigación (FBI), han abierto una averiguación sobre la muerte de Sterling, grabada con la cámara de un teléfono móvil y cuyas escalofriantes imágenes han provocado numerosas protestas.