En 1985 existían alrededor de un millón de construcciones en el Distrito Federal y seis mil, es decir el seis por ciento, resultaron dañadas por el terremoto del 19 de septiembre. 30 años después, el Distrito Federal registra 2.5 millones de casas habitación y solo 150 mil (cinco por ciento) cuentan con un seguro contra sismos.
Cifras de Axa Seguros muestran que después de 30 años la cultura del aseguramiento no ha mostrado avances significativos. En 1985 solo tres por ciento de las casas a nivel nacional contaban con un seguro contra catástrofes naturales, tres décadas después, este porcentaje solo ha crecido a cinco por ciento.
Esto significa que solo tres de cada 100 viviendas en el país están protegidas con un seguro contra sismos y de éstas, el 25 por ciento corresponde a seguros que amparan únicamente la deuda hipotecaria que se tiene al momento de adquirir dicho inmueble y no lo que hay adentro o la vivienda en sí. En la Ciudad de México solo cinco de cada 100 casas cuentan con un seguro.
«Si lográramos cuantificar la pérdida material por los sismos de 1985, estaríamos pensando en daños alrededor de los cinco mil millones de dólares; y para las familias que no contaban con un seguro significó la pérdida del patrimonio que les llevó construir toda una vida”, aseguró Arturo González Briseño, Responsable de Suscripción de Daños de AXA Seguros.
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De acuerdo con la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF), al segundo trimestre de 2015 el sector asegurador emitió primas por 204 mil 296.8 millones de pesos, de los cuales sólo el 21.8 por ciento correspondió a seguros de daños.
En esa categoría, los seguros contra terremotos crecieron 25.4 por ciento, sin embargo del total de la cartera que presenta el sector asegurador con cifras al cierre de marzo los seguros para terremoto sólo representaban el 6.6 por ciento.
Para González Briseño, estas cifras revelan que a pesar de que “los sismos registrados hace tres décadas marcaron el inicio de un cambio en la sociedad mexicana en materia de Protección Civil y de construcción, aún falta generar mayor conciencia en la sociedad para que proteja sus bienes y asegure su patrimonio y el de sus familiares”.
