Los cambios que comienza a operar el gobierno mexicano ahora considerado de extrema izquierda, en la educación que ejerce el estado, ha conseguido alertar a críticos de diferentes países por ser considerado atrasado e imitación de los países ya destruidos por el llamado comunismo.
Al término del pasado ciclo escolar en México, el presidente Andrés Manuel López, anunció un nuevo “programa” educativo para niños y jóvenes del país. Plan que aun cuando el presidente cuenta con autoridad jurídica para implementarlo, alejaría a las nuevas generaciones del conocimiento.
Entre otros cambios, la “educación” mexicana erradica las matemáticas y el español de las materias que se impartirían a las nuevas generaciones. Además de prohibir calificar reprobatoriamente a los alumnos. Sin considerar que se pretende llevar a la conciencia de niños y jóvenes conceptos de extrema izquierda.
Luego del 2018 en que Andrés López llegó a la Presidencia de México, con el apoyo (de acuerdo a analistas nacionales), del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y del expresidente Enrique Peña, se comenzó a hablar de su inclinación hacia un gobierno dictatorial al estilo de Cuba, Venezuela, Bolivia y Nicaragua. Versiones que han sido descalificadas y hoy están siendo aceptadas por cada día más mexicanos.
Los cambios que está realizando el presidente López en México comenzaban poco a poco a llamar la atención de gobiernos demócratas del mundo, pero sin duda lo relacionado con la educación y la militarización del país, han encendido las alertas internacionales.KELLY GRAINSTAIN
