
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reiteró el domingo su mensaje anticorrupción y de austeridad en su primer informe de gobierno, pero reconoció una ola de violencia rampante en el país y una economía estancada.
“La esencia de nuestra propuesta consiste en convertir la honestidad y la austeridad en forma de vida y de gobierno”, dijo el izquierdista, conocido como “AMLO”, en un discurso desde Palacio Nacional en Ciudad de México.
“Nada ha dañado más a México que la deshonestidad de los gobernantes. Esa es la causa principal de la desigualdad económica y social y de la inseguridad y de la violencia que padecemos”, agregó.
El mandatario reconoció que el país sigue con altos niveles de inseguridad, a unos días de que unas 29 personas murieran en un ataque a un bar en Coatzacoalcos, en el violento Estado de Veracruz (este).
“Todavía padecemos de inseguridad y de violencia, considero que por la mala estrategia que se aplicó desde el principio”, dijo al referirse al despliegue militar que hizo el entonces gobierno de Felipe Calderón (2006-2012) para contener a los violentos cárteles de la droga.
En ese sentido, López Obrador insistió en su compromiso de ponerle fin a la violencia.
Detalló que su estrategia para acabar con la seguridad consiste en “que haya buenos empleos y salarios” y la creación de la Guardia Nacional, un cuerpo de seguridad conformado principalmente por militares que ha comenzado a ser desplegado en todo el país.
El mandatario también reconoció que la economía de México, la segunda más grande de América Latina, está “creciendo poco”, aunque la actividad económica en realidad se estancó en el segundo trimestre del año, lo que puso en duda el objetivo de crecimiento de 2% para todo el año de su gobierno.
López Obrador también enlistó algunos de los hechos más significativos de su gobierno como la lucha contra el robo de combustible de inicio de año y las negociaciones que evitaron que Estados Unidos aplicara aranceles a las exportaciones mexicanas si México no frenaba los flujos migratorios provenientes principalmente de Centroamérica.
Mientras López Obrador ofrecía su informe, unas centenas de personas se manifestaron en la céntrica avenida Reforma convocados por políticos opositores, sociedad civil y académicos que buscan ser un contrapeso al gobierno.
Los mandatarios mexicanos están limitados a un solo período de gobierno, y López Obrador reiteró el domingo el deseo de realizar una consulta pública a la mitad de su presidencia, y en gobiernos a futuro, para determinar si los gobernantes electos deberían completar sus períodos.
Arremetió contra la opulencia y la acumulación de riquezas, señalando que ve un compromiso en el sector privado del país por crear empleos, pagar más impuestos y aceptar ganancias ligeramente más bajas. AFP