El gobernador de Hawái, Josh Green, reveló planes para que el estado compre potencialmente propiedades en la ciudad costera de Lahaina, que fue devastada por el incendio forestal más mortífero en la historia moderna de los Estados Unidos.
“Ya estoy pensando en formas para que el estado adquiera esa tierra para que podamos ponerla en viviendas para la fuerza laboral, para devolverla a las familias o hacer que abra espacios a perpetuidad como un monumento a las personas que se perdieron”. Green comentó en medio de las ruinas.
“Queremos que esto sea algo que recordemos después de que el dolor pase como un lugar mágico.
La tragedia en este momento es la pérdida de vidas. Los edificios se pueden reconstruir con el tiempo, incluso el árbol banyan puede sobrevivir, pero no queremos que esto se convierta en un espacio despejado donde la gente del extranjero simplemente venga y decida que lo tomará. El estado lo tomará y lo preservará primero”.
Green expresó su preocupación por los inversionistas extranjeros que explotan el desastre.
En otra sesión informativa, Green reforzó su dedicación a salvaguardar la tierra para los locales. Compartió que discutió con el fiscal general de Hawái sobre «opciones para hacer una moratoria sobre cualquier venta de propiedades que hayan sido dañadas o destruidas».