
Haciendo temer un incipiente alud de defecciones debido al Brexit, tres diputadas del Partido Conservador de la primera ministra británica Theresa May abandonaron el miércoles la formación para sumarse al grupo independiente recientemente formado por ocho laboristas también dimisionarios.
Aludiendo a las fuertes divisiones internas en la formación, las diputadas antibrexit Anna Soubry, Sarah Wollaston y Heidi Allen afirmaron, en una carta a May publicada en Twitter, que «la gota que colmó el vaso ha sido el desastroso manejo de Brexit por parte de este gobierno».
«El ala más derechista (del partido), la incómoda cuadrilla antieuropea, está ahora dirigiendo el Partido Conservador de la cabeza a los pies. Ellos son el Partido Conservador», denunció Soubry en una rueda de prensa conjunta convocada por la tarde.
«El partido que una vez gozó de la confianza del mundo económico y empresarial ahora está marchando hacia el borde del abismo de un Brexit sin acuerdo», agregó Wollaston.
El partido de May vive una muy fuerte tensión entre quienes se oponen a abandonar la UE y los partidarios de una salida neta que corte los puentes con Bruselas, agrupados en el eurófobo European Research Group (ERG).
Un poco más debilitada por este movimiento, la jefa de gobierno conservadora, que el miércoles por la tarde viajaba a Bruselas para intentar una improbable renegociación de su controvertido acuerdo de Brexit, reaccionó expresando su «tristeza» por esta decisión.
«Por supuesto, la adhesión del Reino Unido a la UE ha sido una fuente de desacuerdos tanto en nuestro partido como en nuestro país durante mucho tiempo. Poner fin a esa membresía después de cuatro décadas nunca iba a ser fácil», justificó.
A seis semanas de la fecha prevista para la salida británica de la Unión Europea, el 29 de marzo, el país sigue sin haber ratificado un acuerdo que le permita hacerlo de forma ordenada, después de que el parlamento rechazara estrepitosamente en enero los términos negociados por May con los líderes europeos.
Esto incrementa los temores de un Brexit sin acuerdo que tendría catastróficas consecuencias económicas y sociales para el país.
En este contexto, crecen la voces que piden la convocatoria de un segundo referéndum, tanto a la izquierda como a la derecha del espectro político. Sin embargo, el Partido Conservador se opone abiertamente a él mientras el opositor Partido Laborista tampoco le ha dado su apoyo.
However, men suffering from diabetes, increased cholesterol levels and high blood pressure were excluded from the research. vardenafil pharmacy Many of these products contain viagra generika deeprootsmag.org the active ingredient of Sildenafil. Here are the details about the herbal ingredients used in this order viagra sample generic formula. Stress should be taken care of as and when you take the medicine but make sure that you are purchasing Kamagra tablets from a viagra buy germany deeprootsmag.org licensed and reliable pharmacy, which will ensure that the medication is genuine and hasn’t been tampered with in any shape or form.– «Westminster está roto» –
Las tres legisladoras conservadoras afirmaron que se sumarán al nuevo grupo independiente formado el lunes por siete diputados que anunciaron haber dejado el Partido Laborista también debido a la gestión del Brexit y a la falta de determinación para atajar las actitudes antisemitas de que se acusa a algunos de sus miembros.
Un octavo diputado de la principal fuerza de oposición británica se sumó a ellos el martes por la noche.
Con estas nuevas adhesiones, el Grupo Independiente se convierte en cuarta fuerza política en una Cámara de los Comunes de 650 escaños, tras los 314 diputados conservadores, los 248 laboristas y los 35 nacionalistas escoceses del SNP.
Al anunciar su defección, los dimisionarios laboristas había llamado a otros, de cualquier tendencia política, a sumarse a ellos.
«La conclusión final es ésta: la política está rota, pero no tiene que ser así, cambiémosla», lanzó uno de ellos, Chuka Umunna, que milita por un segundo referéndum para frenar el Brexit.
«Cada uno llegará a su debido tiempo», dijo el miércoles Allen, asegurando saber que «un número significativo de colegas» están listos para seguir su ejemplo en las próximas semanas y meses.
Pese a que muchos de sus electores votaron por abandonar la Unión Europea en el referéndum de 2016, donde el Brexit se impuso por 52% de los votos, ambos partidos tienen fuertes divisiones internas entre los diputados que defienden la permanencia y los que abogan por la salida del bloque.
«Westminster está roto», lanzó el miércoles el nacionalista escocés Ian Blackford ante la cámara baja del parlamento. «Los partidos conservador y laborista está implosionando», sentenció. AFP