Por alguna razón que su micmo pueblo desconoce, China se empeña no solamente en mantener viva la teoría de la pandemia, sino que endurece las restricciones.
Luego de que cada día más países se abren a la normalidad, sin repercusiones. Tras pruebas claras de que los test del virus son un 90 por ciento erroneos y con organizaciones ciudadanas apresuradas por comenzar a investigar las verdades y mentiras que detuvieron al mundo por dos años. China se empeña en encerrar a sus ciudadanos.
Ahora ciudades como Shangai lucen desiertas y es que a sus habitantes ya se les prohibió incluso, salir a recibir algún tipo de alimentos por envio. Es el encierro más grotezco que se recuerde en la ciudad.
Además, la vida en ciudades chinas como esta, dependen de los resultados de los test, que hay que recordar, suele dar positivo hasta al agua natural, según se ha compartido en redes sociales. Este encierro llega ya su cuarta semana y manifiesta una locura que cada día menos se entiende, dicen residentes.
Edward Lawrence, un periodista con cámara en Shanghái para la BBC, conmocionó recientemente a la comunidad online cuando compartió una foto de las ayudas a la alimentación de su amiga embarazada. La foto muestra sólo un rábano blanco y una col en una bolsa de plástico blanca.sr490.com
