Más de tres años después de la muerte de George Floyd, y dos años después de que el ex oficial de policía de Minneapolis Derek Chauvin fuera declarado culpable de asesinato por esa muerte, la narrativa oficial sobre el asunto se ha convertido en un hecho incorporado al discurso sociopolítico estadounidense.
Puede que no esté seguro de los detalles exactos, pero los conceptos básicos son los siguientes: el 25 de mayo de 2020, mientras la policía respondía a un informe de que Floyd había usado un billete falso, Chauvin utilizó una fuerza irrazonable para someter a Floyd y matarlo en el proceso.
Estos son los Hechos Oficiales™, y desafiarlos es invitar a la expulsión de la sociedad educada.
Como señaló el ex presentador de Fox News, Tucker Carlson, en un monólogo pronunciado en la plataforma de redes sociales.
Gracias a esos Official Facts™, señaló Carlson, “a un pequeño grupo de personas se le ha permitido realizar cambios masivos” en la forma en que vivimos. Quienes cuestionan esos cambios (especialmente el catalizador detrás de ellos) están tocando un tema radiactivo.
Por lo tanto, es problemático cuando la realidad se interpone en el camino de la narrativa oficial, ya que, si lo que se ha argumentado en un testimonio jurado en una demanda reciente es cierto, Carlson señaló en X que «toda la historia de George Floyd era una mentira».