
BERLIN (AP) — Una diócesis de la iglesia católica en Baviera anunció el final de una protesta de cinco semanas de migrantes procedentes de los Balcanes en un edificio de la iglesia.
Unos 50 migrantes iniciaron una acampada en el exterior de la catedral de Regensburg a principios del mes pasado, exigiendo su derecho a permanecer en Alemania y protestando contra la designación de los países de los Balcanes como seguros. Unos días después, la mayoría se trasladó a
la vicaría, en la otra punta de la ciudad.La diócesis Regensburg dijo que, tras tres semanas, algunos de los migrantes comenzaron una huelga de hambre y más tarde amenazaron con suicidarse y matar a sus hijos. La diócesis dijo que ya no era la responsable de dejarlos estar allí y les pidió que se marchasen de la zona.
Finalmente dejó incluso de proporcionarles comida. La policía convenció el lunes a al menos 16 migrantes para que dejasen la protesta.