La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) regresó a tomar el control de la sierra del Filo Mayor, en Guerrero, con la consigna de sofocar la confrontación que desde octubre pasado ha generado diez muertes, tres desapariciones, siete heridos y varias viviendas destruidas.
En una reunión con mezcaleros en el Valle del Ocotito, el gobernador de la entidad, Héctor Astudillo Flores, confirmó que desde la mañana de este miércoles 2 de diciembre, 16 días después de que se pactara un compromiso con comisarios de 49 pueblos de la Sierra, la federación regresó a dicha zona para tomar el control y sofocar la confrontación que ha recrudecido la violencia.
Indicó que de primera instancia, la Sedena tiene la consigna de restablecer la tranquilidad en la zona de mayor tensión, como Filo de Caballos, Polixtepec, Ojo de Agua, El Naranjo y Tecomazuchilt, entre otros pueblos.
Astudillo no habló sobre la presencia que tiene en dicha zona el cártel de Guerreros Unidos, como lo denuncian los integrantes de la Unión de Comisarios por la Paz, quienes que aseguran que en 2013 debieron enfrentar a la Familia Michoacana, pero ahora las células de sicarios ingresaron por Iguala de la Independencia.
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Sin embargo, refirió que entre las actividades que la federación desplegará en la zona, está necesariamente el desmantelar a los grupos delictivos que han provocado que la violencia se dispare.
Indicó que la federación tiene sus propias estrategias, las cuales implementa sin dejar de establecer la coordinación con los cuerpos de seguridad de nivel estatal.
Hasta este fin de semana, la vigilancia en los pueblos de la Sierra recaía principalmente en la Fuerza Estatal.
