
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, volvió a ser interrogado por la policía el viernes en Jerusalén, en el marco de una de las investigaciones por supuesta corrupción en las que está involucrado, según medios locales.
Los investigadores llegaron por la mañana a la residencia de Netanyahu para interrogarle sobre el caso Bezeq y sus vínculos con Shaul Elovitch, un empresario que controla el principal grupo de telecomunicaciones israelí, informó la prensa.
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La policía y los servicios del primer ministro nunca confirman estos interrogatorios mientras se llevan a cabo.
Netanyahu ha sido interrogado una docena de veces, como sospechoso o testigo en los casos que le conciernen.
En el caso Bezeq, la policía busca saber si el matrimonio Netanyahu intentó asegurarse una cobertura propicia de parte de la página de información Walla, propiedad de Elovitch, a cambio de favores gubernamentales que podrían haber generado a Bezeq cientos de millones de dólares.
Este caso, abierto en 2017, estalló el 18 de febrero de 2018, con el arresto de Elovitch y otras seis personas, colaboradores cercanos a Netanyahu.
En 2017, Netanyahu era ministro de Comunicaciones, además de jefe de gobierno.
En esta investigación, como en las otras, el primer ministro siempre ha dicho que no tenía nada que reprocharse y ha denunciado una «caza de brujas». AFP