Un jurado de Manhattan declaró culpable a la productora de Robert De Niro de discriminación y represalias contra Graham Chase Robinson, quien solía trabajar para el actor. El juicio de dos semanas terminó en un tribunal de la ciudad de Nueva York.
El caso de Robinson llegó a un tribunal civil y el jurado dijo que la compañía de De Niro, Canal Productions, tuvo que pagarle 1,2 millones de dólares en daños y perjuicios. Esto es un poco más de 633.000 dólares por cada cargo de discriminación y represalias.
El veredicto pone fin a un juicio de dos semanas y una batalla de cuatro años entre De Niro y Robinson, quien dijo que el actor seguía haciendo comentarios sexys y peticiones degradantes. Dijo que De Niro seguía asignándole tareas de bajo nivel no relacionadas con su trabajo.