La candidata presidencial demócrata, la vicepresidente Kamala Harris, mordió el anzuelo y encendió a sus seguidores y estos se enfurecieron.
La vicepresidente apareció en Houston, Texas, la semana pasada con la estrella musical mundial Beyoncé en lo que mucha gente creía que sería un concierto gratuito.
Pero cuando la cantante no actuó y abandonó el escenario después de unos minutos, los fans se enfurecieron, informó The Daily Mail.
Algunos asistentes dijeron que cuando Beyoncé salió del escenario, los fanáticos comenzaron a abandonar el edificio porque no habían asistido al evento para ver al vicepresidente.
“Cambiar y cebar la multitud”, dijo un asistente furioso. «Prometió una actuación para atraer a la gente y se dirigieron a las salidas cuando Beyoncé abandonó el escenario».