Cuando le preguntaron su postura respecto a la mariguana en un evento de campaña, el primer ministro Stephen Harper ofrece la siguiente respuesta:
«El tabaco es un producto que hace mucho daño. La mariguana es infinitamente peor y es algo que no queremos promover».
Después reiteró su comentario al decir que «cada vez hay más evidencia científica y medica contundente acerca de los efectos negativos a largo plazo de la mariguana».
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Los obsesionados con la ciencia podrían sentirse tentados a señalar que esta afirmación no cuenta con fundamentos. En términos métricos, los cigarros daña mucho más a los canadienses que la mariguana, con entre las 30 y 40 mil muertes anuales (ninguna muerte ha sido asociada con la mariguana). Y hablando de métricas, cualquiera que se dedique a corroborar información podría argumentar que hay muchas de ocular la verdad y los efectos negativos de la mariguana contra los del tabaco y la comparación es técnicamente finita, contrario a lo que dijo el primer ministro.
Pero no estamos buscando los tres pies al gato. Si descartamos los factores triviales, como las enfermedades y las adicciones, y nos concentramos en las cosas que realmente importan, como evitar el munchies y la conveniencia de no tener que armar un toque, entonces Harper tiene toda la razón. La lista a continuación prueba que la mota es «infinitamente» peor que el tabaco.