Cuatro presuntos delincuentes murieron este domingo en un enfrentamiento con militares en el municipio fronterizo de Matamoros (noreste), una de las ciudades más violentas de México, por pugnas entre narcotraficantes, informó el gobierno en un comunicado.
El choque se produjo cuando los militares patrullaban en el ejido de Ensenada «y se toparon con un convoy de civiles armados que se desplazaban en varios vehículos», informó el Grupo de Coordinación Tamaulipas, al que pertenece Matamoros, fronterizo con Brownsville (Texas, Estados Unidos).
Los civiles «abrieron fuego contra el personal de la Sedena (Secretaría de la Defensa Nacional) en un intento por evitar ser detenidos», añadió.
En el lugar del enfrentamiento «quedaron sin vida cuatro de los agresores y los militares detuvieron a otros tres», confiscaron tres vehículos, seis armas largas, un fusil Barret calibre .50, un lanzagranadas, una granada, cargadores y cientos de cartuchos, precisó el Grupo de Coordinación Tamaulipas, conformado por fuerzas federales y estatales y creado para hacer frente a la violencia que afecta a ese estado.
Matamoros es una ciudad de 490.000 habitantes que ha sufrido un repunte de la violencia que las autoridades atribuyen a disputas internas en el cártel del Golfo, el más fuerte que opera en esa región, y de éste con sus exaliados Los Zetas.
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El 8 de marzo hombres armados dispararon contra el convoy en el que viajaba la alcaldesa de Matamoros, Leticia Salazar, quien salió ilesa de la agresión.
Poco más de un mes antes desconocidos habían arrojado una granada desactivada en el estacionamiento de la alcaldía, y el 2 de febrero fue lanzado otro explosivo contra instalaciones locales de la cadena Televisa, hiriendo a dos guardias.
A inicios de ese mismo mes al menos 14 personas murieron en una serie de enfrentamientos entre grupos criminales y también entre narcotraficantes y efectivos del operativo especial de seguridad que mantiene en esa zona el gobierno mexicano.