CARLOS LOZANO/SHAMROCK490
Morelia, Michoacán a 10 de abril del 2015.- El grupo policíaco creado por el ex Comisionado para la Seguridad y el Desarrollo de Michoacán, pasó de ser un remedio para la inseguridad y se convirtió en una cadena de abusos contra ciudadanos de pie.
La llamada Fuerza Ciudadana sigue dando pie a inumerables quejas por parte de la ciudadanía, principalmente en el tema del tránsito. Cuyo reglamento desconocen los oficiales y del que se agarran para atormentar a los michoacanos.
Son muchas las quejas que día a día llegan a las redacciones de diversos medios de comunicación por parte de los michoacanos en contra de los miembros de Fuerza Ciudadana, pero esta vez, la experiencia fue comprobada por un compañero reportero.
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El comunicador no cometió más falta que detener su unidad 5 de los 15 minutos que le permite el Reglamento en una área restringida para estacionarse. Cuando con autoritarismo y malos tratos, fue interceptado por los uniformados, quienes se dejaron sentir para amedrentar al tranquilo moreliano, quien insistía en saber por qué esa acción de la «autoridad».
Ramiro Rámirez Rangel es el nombre que portaba el uniformado quien luego de dar un empujón al comunicador, se limitó a llamar una grúa que atípicamente por cierto, llegó en cuestión de 5 minutos para simplemente llevarse la unidad amonestada. Desde luego, nunca se informó cuál era la razón de la retención del vehículo y sin dar un sólo documento que amparara la infracción.
La Fuerza Ciudadana fue creada a empujones, por la fuerza, con muchos problemas de por medio; fue conformada por gran cantidad de gente venida del Estado de México y desde luego, es una organización reprobada por los michoacanos. Se esperaría que los elementos dieran muestra de madurez y conocimiento para que se deje de pedir a los candidatos a Gobernador su desaparición. Por el contrario, quienes hoy comen gracias a portar un uniforme que les fue prestado, están haciendo méritos cotidianos para que la demanda de los michoacanos siga siendo: Fuera Fuerza Ciudadana.
Ojalá que mandos superiores tomen cartas en el asunto y eviten, abusos de los oficiales que desde luego, no0 tienenque parar en la redacción de un medio de comunicación, si no en Derechos Humanos, porque evidentemente, olvidaron que su compromiso es con la inseguridad y se voltearon a los más fácil, a lo más sencillo, infraccionar y retener vehículos con abuso de autoridad…