Alrededor de cuatro mil representantes de trabajadores, indígenas, estudiantes y de otros gremios, realizaron el miércoles una marcha de protesta en contra de las políticas económicas, sociales y laborales del gobierno del presidente Rafael Correa.
Los opositores rechazan, además, la intención del partido de gobierno Alianza País de aprobar un proyecto que permite la reelección indefinida de las autoridades de elección popular incluida la del jefe de estado.
El presidente de la mayor organización indígena del país, la Conaie, Jorge Herrera, señaló que «el gobierno no tiene capacidad política para resolver la crisis».
Los manifestantes portaban pancartas que decían «Fuera Correa fuera», «Correa, basta de correazos» y «No queremos ser como Venezuela», entre otros.
Similares demostraciones se cumplieron en Guayaquil, Loja y otras ciudades.
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Frente al palacio de gobierno, en pleno centro histórico, también se apostaron cientos de simpatizantes de Correa en un acto en el que primaron los discursos y las intervenciones musicales.
El canciller Ricardo Patiño afirmó que «aquí estamos para demostrarles que este pueblo no se va dejar arrebatar nuestra democracia, no vamos a permitir que se trate desestabilizar o irrespetar al gobierno, no nos van a arrebatar al futuro, ni vamos a regresar al pasado».
Los alrededores y principales accesos al palacio del gobierno estaban custodiados por cientos de policías que con vallas metálicas impedían el paso a grupos opositores hacia la denominada Plaza Grande, donde se cumplía la demostración a favor del gobierno.
Los sectores que protestan han cumplido alrededor de una decena de demostraciones de este tipo en rechazo de la gestión de Correa, quien llegó al poder en enero del 2007 y debe permanecer en el cargo, a menos que logre aprobar la reelección indefinida, hasta el 2017.
