Será el próximo domingo 23 de julio cuando los españoles tendrán la oportunidad de elegir si continúan con un gobierno que ha undido al país en una profunda crisis general o se entregan a la oportunidad de comenzar a reconstruir su patria.
Aunque la fecha de las elecciones ha sido elegida por el presidente de Gobierno, Pedro Sánchez, (así se lo permite la ley), en plenas vacaciones irrenunciables para el pueblo español, los analistas en gran cantidad, esperan que los ciudadanos hagan un esfuerzo y emitan su voto.
Sin embargo, se considera, que gran cantidad de españoles podrían inclinarse por emitir su voto con el sistema de mayor riesgo existente en la actualidad: por correo.
Se habla de al menos 3 millones de nuevos españoles, que han sido reconocidos así por la vía de la naturalización, aunque su ingreso al país haya ocurrido recientemente y esos votos, sin duda, serán para el gobierno de izquierda radical de Sánchez.
Por estas y muchas otras condiciones, se prevé unas votaciones complicadas, sí para el PSOE, el partido oficial, cada vez con mayor número de arrepentidos. Pero también se verán en aprieto las derechas, que aunque ganan día tras día simpatizantes, si la votación de la mayoría se hizo por correo, no se tendrá un panorama claro para el país, durante los próximos años.