Centenares de cocaleros se enfrentaron el martes con la policía tras protestar por un proyecto de ley que según afirman favorece los sembradíos de cultivadores representados por el presidente Evo Morales.
Los cocaleros salieron en marcha la mañana del martes para acudir al diálogo convocado por el gobierno después de lograr la víspera que se suspendiera el tratamiento de la polémica iniciativa en la Cámara de Diputados.
Imágenes de la televisión local mostraron cuando la policía comenzó a arrojar gases lacrimógenos para disipar la manifestación, lo que generó una reacción de los cocaleros que respondieron con piedras y provocaron destrozos a un escenario en el que seguidores de Morales esperaban concentrase a favor de una tercera relección del gobernante.
«Este gobierno que fue nuestro aliado ahora nos trata mal, nos gasifica, nos trata como enemigos», dijo el vicepresidente de la Asociación Departamental de Productores de Coca, Gregorio Chamizo, que representa a la zona de los Yungas.
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En los enfrentamientos, que siguieron a tres días de vigilia, hubo 43 detenidos y varios heridos.
El ministro de Gobierno, Carlos Romero, condenó los destrozos provocados por los cocaleros y pidió que depongan su protesta para iniciar el diálogo y consensuar el proyecto de ley.
La iniciativa reconoce dos regiones productoras de coca: los Yungas, al norte de La Paz, y Chapare, en el centro de la región de Cochabamba y bastión de Morales. La ley actual sólo reconoce a los Yungas como área tradicional.
De aprobarse el proyecto se permitirían 13.000 hectáreas de cultivo legal de coca para los Yungas, 1.000 más de lo que actualmente se permite, y 7.000 para el Chapare. Los productores de los Yungas presentaron un proyecto en el que reclamaron 24.000 hectáreas. AP