Al menos 12 personas murieron, incluidos seis niños, y 12 estaban desaparecidas después que un bote con unos 50 migrantes se hundió en el mar Egeo, dijeron el miércoles las autoridades griegas.
La guardia costera anunció el rescate de 26 personas. El accidente se produjo de madrugada cuando una embarcación de madera en la que viajaban los migrantes desde Turquía naufragó cerca del islote de Farmakonissi.
Los muertos eran seis menores, cuatro hombres y dos mujeres. Sus nacionalidades se desconocían.
De acuerdo con The Associated Press, guardacostas y barcos de la marina, un helicóptero y un barco de la agencia europea de fronteras Frontex buscaban a los desaparecidos en la zona.
Las condiciones climáticas en el área eran apacibles pero los sobrevivientes dijeron a la guardia costera que la embarcación empezó a hacer agua poco después de zarpar de Turquía.
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Algunas naciones balcánicas han dejado de admitir el ingreso de refugiados excepto los provenientes de países en guerra, considerando que los demás solo buscan mejorar su situación económica. Macedonia solo permite la entrada de refugiados de Siria, Afganistán e Irak y ha dejado a miles de otras personas atascadas en el sector griego de la frontera, donde se han sucedido protestas, a veces violentas.
Las manifestaciones han paralizado durante tres semanas un servicio ferroviario de carga con el norte de Europa.
La policía griega lanzó una operación el miércoles en la madrugada para alejar del área fronteriza a los migrantes, muchos de ellos de Irán, Marruecos y Pakistán.
Escoltados por policías en motocicletas y patrulleras, unos 30 autobuses con unos mil 500 migrantes marchaban al sur desde la zona fronteriza de Idomeni. Se anticipaba su llegada horas después a Atenas, donde las autoridades han improvisado refugios y alentarán a los migrantes a solicitar asilo en Grecia.