Las violaciones a los derechos humanos de los migrantes en México se han incrementado drásticamente a raíz de que el Gobierno reforzó los operativos en sus fronteras por una ola migratoria en Estados Unidos el año pasado, reveló este miércoles un reporte de varias ONG.
El plan Frontera Sur que implementó el Gobierno mexicano en julio de 2014 «ha significado violación a los derechos humanos, un cierre virtual de la frontera, una retención masiva y por supuesto una deportación masiva de personas migrantes», denunció el sacerdote Tomás González, director de un albergue humanitario para migrantes, durante la presentación del informe en Ciudad de México.
«Ha sido una herramienta para hacer daño a las personas migrantes y el brazo ejecutor es el Instituto Nacional de Migración, (…) que se ha policializado» pese a que la estrategia gubernamental fue presentada como un plan «en favor de los derechos de los migrantes (…) y el desarrollo social» de la zona, abundó.
Un total de 97 mil 254 migrantes fueron aprehendidos en México entre julio de 2013 y junio de 2014 contra los 168 mil 280 retenidos en el mismo lapso del año siguiente, lo que representa un aumento de 73%, indica el informe «Un Camino Incierto», realizado por nueve ONG, entre ellas la estadounidense Washington Office on Latin America (WOLA) y el Centro de Análisis y Reflexión Fundar.
Impunidad latente
Según el informe, se han documentado secuestros, extorsiones, robos y agresiones durante los operativos gubernamentales «que se llevan a cabo cada vez más en colaboración con instancias de seguridad», y la gran mayoría de esos delitos siguen impunes a pesar de la creación de fiscalías especializadas.
En el estado de Oaxaca sólo ha habido cuatro sentencias para delitos contra migrantes en los últimos cuatro años, pese a haber recibido 383 denuncias.
Por otro lado, el informe deplora que las autoridades participen en uno de cada cinco delitos contra el migrante, según cifras de La Red de Documentación de las Organizaciones Defensoras de Migrantes.
El reporte asegura que la Policía Federal es la fuerza que más participa de estos delitos (29.8%), seguida de las policías preventivas municipales (22.8%) y las policías estatales (7.4 por ciento).
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«Dos muros» fronterizos
Los crecientes peligros para los migrantes no se limitan a la frontera sur.
En la frontera norte «hay dos muros, el primer muro es la mafia, que a veces es mucho más difícil de atravesar que el muro (legal) de Estados Unidos«, estimó Marla Conrad, de la Red Sonora.
En su informe, los activistas retratan la historia de un mexicano que tras vivir casi toda su vida en Estados Unidos fue deportado a la mexicana Sonora, donde fue obligado durante un mes a trabajos forzados para cavar un túnel, presumiblemente para transportar drogas a Estados Unidos.
«Trabajábamos toda la noche, no nos dejaban dormir. Si nos quedábamos dormidos traían agua fría en la cara o nos daban una patada en el estómago (…). Tomaron algunas de las personas que fueron secuestradas cuando eran débiles por no comer y se habían vuelto locos diciendo que ‘su tiempo había llegado'», relata este hombre bajo el anonimato, quien logró escapar.
El Gobierno de México implementó el plan Frontera Sur en julio de 2014 luego de un ola de migrantes menores no acompañados que llegó a Estados Unidos.
En abril de 2015 el gobierno estadounidense reportó una caída de 28% en sus detenciones de migrantes indocumentados en su frontera con México.
Según WOLA, entre octubre 2014 y abril 2015, México ya arrestó más ciudadanos centroamericanos que Estados Unidos.