Un grupo de voluntarios de una ONG cristiana estadounidense se coloca sonriente para hacerse una selfi frente a unas carpas de una obra en construcción. Su objetivo es construir una clínica en Gaza, junto a la barrera israelí, un proyecto que levanta sospechas.
De hecho, esta clínica en construcción, plantada literalmente cerca de un puesto fronterizo israelí de Erez, al lado de un corredor hecho con vallas que une al resto del mundo con Gaza, tiene todos los papeles para que comience a funcionar.
Su presencia hace parte de un excepcional proyecto apoyado a la vez por Israel y los islamistas de Hamas, que controlan la Franja de Gaza, un enclave palestino de dos millones de habitantes.
La infraestructura en obra, que los habitantes de Gaza denominan «hospital estadounidense», es financiado por Friend Ships, una ONG cristiana de Louisiana, del sur de Estados Unidos, poco conocida en el mundo de las organizaciones humanitarias en zona hostil.
La organización, que ya había instalado una clínica bajo carpas en la disputada frontera con Siria, que los israelíes consideran como suya, rechazó las peticiones de entrevista de la AFP.
Pero el sitio internet de la organización indica que una vez funcione, la clínica de Gaza facilitará gracias a la telemedicina consultas con especialistas en el extranjero, y ofrecerá tratamientos para cáncer y trastornos postraumáticos.
«Vamos a ofrecer servicios a la población cuatro días por semana y los que deseen hacer turismo podrán pasar tres días aprendiendo a conocer a Israel», precisa además el sitio internet de la organización de voluntarios cristianos.
«Es una posibilidad para saber más de la historia de la región y hacer parte de la obra que cumple Dios aquí y ahora», agrega la página Facebook, que tiene fotos de jóvenes sonrientes instalando carpas en territorio de Gaza.
– Autorizado por el Hamas –
Hamas, que no reconoce oficialmente el Estado hebreo, e Israel, se enfrentaron en tres guerras desde 2008, la última en 2014, y los choques siguen siendo frecuentes pese a una tregua entre ambos bandos acordada bajo patrocinio de Egipto, la ONU y Catar.
En Gaza, los hospitales siguen por lo regular desbordados y carecen de medicinas y equipos, ya que a algunos se les prohíbe ingresar al enclave en virtud del bloqueo israelí impuesto desde hace más de una década, pues Israel teme que algunos recursos sean desviados por el Hamas.
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De lado de Hamas, se hace una distinción importante. «El hospital estadounidense está administrado por una organización caritativa estadounidense y nada tiene que ver con el gobierno estadounidense», subrayó recientemente Jalil al-Haya, segundo del Hamas en la Franja de la Gaza.
«Evaluaremos el trabajo de este hospital y los servicios que ofrece a la población, y si no logra el nivel requerido, trabajaremos para cerrarlo», agregó.
Una fuente en el ministerio de la Salud en Gaza indicó a la AFP que los primeros equipos llegaron al lugar en septiembre, y aseguró que supervisará el trabajo de la clínica.
– Guerra des clanes –
Pero varias fuentes humanitarias indicaron a la AFP que esta clínica no fue objeto de ninguna coordinación con la ONU o las agencias humanitarias que trabajan en Gaza.
«Lo que Gaza necesita es dinero para pagar personal médico, equipos y medicamentos, no una nueva clínica», critica un humanitario que considera extraño el lugar donde funcionará la clínica de Friend Ships.
Aunque el movimiento islamista autoriza por ahora el proyecto, este es objeto de críticas de parte del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abas, cuya organización laica Fatah controla Cisjordania y sostiene relaciones tormentosas con Hamas.
«Hamas comete un crimen contra la causa palestina y contra el pueblo palestino al aprobar este hospital», dijo Abas, quien señala que sospecha, sin pruebas, que la clínica oculta una base estadounidense.
Para Mujaimer Abu Saida, profesor de ciencias políticas en la universidad Al-Azhar de Gaza, la clínica es una prueba tangible de la tregua con Israel y ofrecerá una alternativa a los habitantes de Gaza que no obtengan la autorización de salir del enclave para hacerse atender.
Pero Mahmud Abas teme que Estados Unidos e Israel dividan aún más a los palestinos al reconocer la autoridad sobre de Hamas sobre Gaza, afirma. AFP