
Justin Trudeau, presidente de Canadá, ha vuelto a despertar la molestia de su pueblo, tras
amenazar a quienes no se inyecten.
«Creo que una de las cosas que hay que recordar a medida que se acerca la temporada de gripe, es que las personas necesitan vacunarse, ya sea vacunándose contra la gripe o poniéndose al día con sus vacunas contra el COVID», dijo Trudeau.
Pero luego sutilmente, convierte esa sugerencia en una amenaza que ha despertado la furia de los canadienses.
«Si podemos obtener un nivel lo suficientemente alto de vacunación, reducimos el peligro de tener que tomar otras medidas de salud para asegurarnos de que todos estemos seguros…»
Palabras que sonaron como código para comandos y restricciones, según la ciudadanía.